Una habitante de este universo ¡y soy mexicana!
- Mariana E

- 24 jun 2020
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 24 jun 2020

Nacer en México me ha permitido ver los contrastes
más lindos y terribles de mi existencia.
Siempre he estado orgullosa de ser mexicana y en otras muchas ocasiones llena de vergüenza e indignación; y te quiero platicar mis razones.
Amo nuestro idioma, nuestro lenguaje, una lengua romance. Si realmente hiciéramos un mejor uso de ella sería un deleite para el oído y para el alma. Cada región de México tiene colores bastante peculiares, llenos de magia y luz. En cada rincón y en cada hogar la comida es un deleite para el paladar y cada una tiene su magia. Hemos sabido mezclar nuestras tradiciones con las de otras culturas, dando a la cocina esa alquimia especial todos los días.
Todos y cada uno de nuestros paisajes, desde los mares, ríos, lagunas o montañas son vistas preciosas y lugares hermosos, los cuales espero un día recorrer y poder decir que conozco México completito.
Estoy de paso en esta existencia y no sé cuánto tiempo viviré. El tiempo es relativo; lo que para muchos podría parecer una eternidad para otros es un simple abrir y cerrar de ojos. De lo que sí estoy segura, es que no quiero estar de paso en esta vida sin hacer más, mucho más, no solo por mí sino también por los que me acompañan en el camino y también por los que no conozco y que de alguna manera estamos conectados, porque en realidad creo que todos somos #UNO, aunque a veces nuestros cortos pensamientos no alcancen a asimilarlo.
En esta existencia, como cualquier ser humano he cometido muchos errores. Un tiempo me ha ganado la culpa y me he tratado sumamente mal. He sido mi mayor juez y a veces no he usado las palabras más lindas conmigo. Viendo en perspectiva, creo que las cosas buenas han superado a mis errores. Y en consciencia he aprendido a hablarme mejor, he aprendido de mis errores, los cuáles espero no volver a cometer y que realmente se hayan convertido en lecciones y aprendizajes.
¿Y a dónde voy con todo esto?
Sencillo y no al mismo tiempo; me duele todo lo que está pasando en México. La situación que estamos viviendo ha llevado a muchas personas a mostrar lo peor de sí mismos (al menos así lo veo). Y otras no han comprendido el daño que le siguen haciendo a México y lo peor, como decía, es que solo estamos de paso. No quiero entrar en mucho detalle, ya que si te importa México sabrás la pérdida abismal de empleos que se tienen todos los días, las muertes que ocurren, cada vez más cercanas, las personas que están muriendo de hambre todos los días y cuantos que desde su balcón habitan una existencia de privilegio y no saben en cuál de todas sus casas pasar su existencia ya que tienen tantas que les es difícil decidirse, funcionarios haciéndose más ricos a costa de la gran mayoría y un presidente al que no le importa acabar con miles de árboles y pasar por encima de la naturaleza, simplemente por un proyecto caprichoso que no tiene cabida. Pocas veces me pronuncio al respecto en este espacio, y hoy lo hago porque no puedo creer que sigamos viendo pasar las cosas y no hagamos algo. E insisto, podemos hacer mucho más que vivir en la comodidad.
Pregúntate: ¿Cómo SÍ puedo sumar para que este país sea lo que quiero ver para mí y las próximas generaciones?
Me encantaría que esta situación terminara (CoVid) y no por salir a la calle a correr, o por ver a todos mis amigos y familiares y poder abrazarlos con la confianza que siempre lo hacía. Hoy quiero que esto acabe más que nunca porque son más los mexicanos que están sufriendo por esta situación. Las cifras para México ya eran muy malas; hoy se ven peor en todos los ámbitos: económico, social o de inversión extranjera y pareciera que no hay ninguna señal, una luz. Y lo peor es que no se ve en el ambiente político una fuerza que realmente se contraponga a las decisiones del actual presidente. Y me preocupa porque ayer salió a cuestionar instituciones como el INE y cada semana es la misma historia con organismos e instituciones diferentes. No puedo creer que estamos retrocediendo de esta manera. Me duele profundamente y al mismo tiempo me llena de coraje no poder hacer más. Me han recomendado sumarme a asociaciones y a otros temas como FRENAA, y estoy en la búsqueda del mejor de acuerdo con mis ideales y mis convicciones. Siempre me he considerado una activista de ciertas causas, de las cuales les he compartido y en esta ocasión iré sobre lo mismo.
Podría seguir, pero no quiero abrumar y no es el punto… lo que quiero es simplemente hacer consciencia de esta situación y no dejarla de lado, porque me importa el lugar donde nací y habito.
Hoy nuevamente nos asustamos por un sismo que ocurrió. Afortunadamente estaba en el lugar correcto y con las personas que más amo en mi vida, y puedo decir que hasta tuve la fortuna de ver a la distancia a vecinos que extrañaba ver, aunque me dolió no poder abrazarlos como solíamos hacerlo. Este sismo fue un simple recordatorio de que somos parte de un universo al que no controlamos. Lástima que son pocos que lo entienden así.
Ojalá algún día México sea un país donde podamos observar más ciudadanos preocupados y ocupados porque nos vaya bien y no simples mortales, viendo solo por intereses propios.
Tuve que hacerte sentir incómodo, de lo contrario nunca te habrías movido.
El Universo




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