Nos seguimos rompiendo como sociedad…

La situación que seguimos viviendo en México (CoVid-19) nos sigue polarizando, rompiendo como sociedad…

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México, el 3er país con más muertes en el mundo y no lo dejaré de decir: no son cifras, son vidas humanas.

Al interior de muchas familias, con amigos, existen discusiones sobre cómo cuidarse, sobre cómo llevar esta situación. La realidad es que esta pandemia nos ha puesto a todos en un contexto completamente desconocido y al mismo tiempo, una vez más, nos ha polarizado. Pensábamos que esto terminaría en junio y teníamos de cierta forma esa ilusión, esa luz en el camino que nos daba esperanza de volver a una nueva realidad. Confiamos –ilusamente– cuando el gobierno nos habló de la fecha en que esto terminaría... decían que en mayo. Seamos honestos, volvimos a confiar y creer, aunque en el fondo muchos sabíamos que no sería así.

La situación no fue así; terminó junio, después julio, y justo ahora entrando en agosto no vemos que esto cambie para bien o que las cifras bajen. Pareciera que esto no tiene fin y personalmente he pensado que la situación nos llevará a vivir de esta manera hasta diciembre, al menos en México. En otros momentos he planteado hasta marzo 2021, pero trato de aferrarme a la idea de que no será así.

Y si esto no va a cambiar, ¿nosotros cambiaremos?

Llámenme soñadora, pero estoy convencida de que el ser humano sí cambia, sí se transforma cuando quiere y asume su rol en la sociedad. En lo personal no soy la misma que hace un año, que hace un mes, incluso que el fin de semana. No soy la misma porque he vivido momentos que me han marcado y de los que he tenido que aprender ciertas lecciones y sin duda he ido madurando.

Por lo mismo, me encantaría –como buena soñadora– que entendiéramos que esto solo va a cambiar cuando asumamos nuestro rol en esta situación y nos cuidemos los unos a los otros. Pero no esperemos que el otro actúe como nosotros pensamos que es lo correcto. Y para eso, en realidad me encantaría que dejáramos de juzgarnos, ¡de VERDAD!.

¿Quién tiene la verdad absoluta de las cosas o de la situación? NADIE.

NADIE tiene una verdad ABSOLUTA. Todos tenemos un cachito de verdad, que a nuestro criterio y razón hace sentido (nuestra consciencia). Y sí creo que la gran mayoría de las personas hacen de verdad lo que les es posible y nada más.

Sin embargo, lamentablemente no estamos en una situación donde podamos dejar al criterio de las personas usar o no usar cubrebocas o lavarse las manos, usar gel entre otras cosas. Pero qué pasa cuando me encuentro que el fin de semana en Berlín, hay protestas por las medidas de seguridad que impuso el gobierno, eso hace que me cuestione aún más. No porque sea Alemania, sino simplemente porque de verdad cada ser humano es distinto y está haciendo lo que puede con lo que tiene, lo mejor posible.

A la gran mayoría esta situación no le ha sido sencilla. Perder algo de lo más preciado que tenemos, la libertad, o en muchos otros casos empleos y lo más triste de todo, a familiares. Hay quienes han perdido todo esto.

Por estas mismas razones, entre muchas que pueden existir, dejemos de juzgarnos, de atacarnos, de criticarnos, de seguir polarizando al país.

¿Y si hacemos lo opuesto? Si en lugar de enojarnos en la calle y gritarnos ¡ponte el cubrebocas! o más cosas que he escuchado, ¿nos ayudamos entre nosotros?. Carga siempre un cubrebocas extra, gel antibacterial extra y apoya a los que no tienen, difunde información de valor que ayude.

Hoy existe una saturación de información, pero más que saturación yo veo mucho “hate” en muchos lados, porque las personas no están actuando como nosotros “suponemos” que deberían hacerlo y señores, seamos claros, ¿quién sabe actuar ante esta situación?, ¿quién tiene la verdad absoluta? Según yo, nadie. Si existiera esa persona que supiera cómo resolver de raíz esta situación, hace mucho ya se hubiera resuelto.

Pero como esto no es así, tenemos otra opción y la opción es apoyarnos los unos a los otros, ayudarnos, pero no queriendo imponer nuestra “verdad” a nadie. Todos tenemos las suficientes razones para ser quienes somos y actuar como lo hacemos.

No conocemos la historia de las personas allá afuera, no sabemos por qué salen a la calle todos los días y asumimos razones y juzgamos demasiado… paremos esa situación, hagamos lo opuesto.

Cuando estamos a gusto con nosotros mismos, dejamos de juzgar.

Pareciera que nadie está a gusto, que todo mundo ya está desesperado, harto, por no decir otra cosa, pero esto no nos da razón para señalar a los que nos rodean. Ese dedo que apunta a los demás, es la misma mano que tiene tres dedos señalando de regreso. Así que veamos qué estamos haciendo cada uno de nosotros por nosotros y por nuestro entorno.

Tú ya usas cubrebocas, cumples con todas las medidas sanitarias posibles, entre muchas otras cosas. Eso está buenísimo, quiere decir que estás asumiendo tu rol en función de la situación. Y si voy un paso más allá (primas, aunque se rían), si cuidas y mantienes tu sistema inmune fuerte estás viendo por ti y por tu entorno y sabes... ¡GRACIAS!

No sabemos cuánto tiempo más sigamos viviendo esta situación, pero tratemos de verdad de ser mejores SERES humanos, más conscientes de nosotros y de nuestro entorno.

Ayudémonos los unos a los otros.