La corrupción sí mata. ¿HASTA CUÁNDO?
- Mariana E

- 7 may 2021
- 4 Min. de lectura

La corrupción de la política empieza por la corrupción del lenguaje.
George Orwell
José Luis Hernández Martínez, de 60 años. Juan Luis Díaz Galicia, de 39 años. Melitón Velasco López, de 48 años. Angélica Segura Osorio, de 44 años. Liliana López García, de 37 años. Mario Alberto Bautista Sánchez, de 25 años. Immer del Águila Pineda, de 29 años. Miguel Ángel Vázquez Castellanos, de 24 años. Cristian López Santiago, de 41 años. Jesús Baños García, de 28 años. Alejandro Mendoza Vega, de 53 años. Carlos Emanuel Pineda Bernal, de 38 años. Evaristo Lucas Santiago, de 56 años. Gildardo Rodríguez Galicia, de 53 años. Ismael Salazar Juárez, de 42 años. José Juan Galindo Soto, de 40 años. Lorenzo Islas Cruz, de 60 años. Miguel Ángel Espinosa Flores, de 42 años. Nancy Lezama Salgado, de 23 años. Santos Reyes Pérez, de 31 años. René Jorge García Méndez, de 78 años. Sergio Valentín Rodríguez Salcedo, de 61 años. Brandon Giovanny Hernández Tapia, de 13 años. Gabriela Ramírez Medina, de 27 años. Ildefonso Barrios Castañeda, de 47 años.
No es cualquier lista, son los nombres de 25 personas que sus vidas fueron coartadas por la CORRUPCIÓN de este gobierno.
Indignada, con el corazón comprimido, con un nudo en la garganta, con ganas de gritar ¡BASTA!
Así me sentí, y puedo decir que fue el sentir de muchos mexicanos que no podemos creer lo que es evidente para el mundo, pero no para este gobierno. LA CORRUPCIÓN nos está MATANDO, todos los días.
A menos de un mes de las elecciones, muchos seguimos sin encontrar la persona que queremos que nos represente en las cámaras, en los estados, tampoco hemos encontrado al partido político que presente una verdadera propuesta de valor; hemos perdido la esperanza, está última es la que más preocupa en estos momentos.
Momentos sumamente difíciles para el país en todos aspectos. Pareciera que no existe ninguno que se salve, y esta semana le sumamos una tragedia más, una situación que duele profundamente porque llevamos más de un año perdiendo vidas como consecuencia de la pandemia y en esta ocasión, más de 25 familias perdieron a sus seres queridos y más de 70 personas, entre ellos varios menores de edad se encuentran lesionados en hospitales, en lo que ha sido el mayor accidente que el metro de la Ciudad de México ha tenido en su historia.
Ser la portada en varios diarios del mundo con esta noticia, no es politiquería, no es un ataque hacia usted Señor Presidente, no todo gira alrededor de usted, es todo lo opuesto. Es simplemente la evidencia de lo que prometió erradicar y hoy nuevamente forma parte de su gobierno, LA CORRUPCIÓN.
El abuso de poder, de influencia, de mal uso de los recursos financieros y humanos se han vuelto recurrente y una repugnante realidad de México y por si fuera poco, se ha vuelto sinónimo de este país.
De acuerdo con el ranking de Transparencia Internacional, México subió del puesto 130 al 124 en percepción de la corrupción, de un total de 180 países que conforman el listado. Pero ¿de qué sirve esta cifra? si en la realidad esto no es palpable. Hoy se siguen perdiendo vidas, producto de esta situación.
En perspectiva somos el país peor evaluado de la OCDE que tiene a 37 países, así como el penúltimo del G-20, solo después de Rusia, estamos al fondo del listado con Sudán del Sur y Somalia.
La impunidad es pan de cada día, conocemos los casos que están abiertos como Odebrecht, la estafa maestra y muchos más. Y ¿qué pasa en México? NADA, eso es lo peor, NADA, las autoridades no hacen su trabajo porque simplemente son parte del problema.
Más de medio millón de personas utilizan la línea 12 del metro diariamente. Son vidas. En su momento, esta construcción fue motivo de orgullo de un gobierno de izquierda que anunciaba la inauguración, con una inversión histórica de 1,800 millones de dólares. Y que desde la edificación se dijo que no era viable que el metro se construyera de esa forma y aun así se hizo. Un gobierno que prefirió no escuchar, no ver, no accionar lo que era evidente; una línea 12 del metro, la famosa Línea Dorada, presentaba graves problemas de construcción y que aun así decidió hacer caso omiso.
Nuevamente, la Jefa de Gobierno cargando más muertes a cuestas. La tragedia del metro se suma a la muerte de niños en el Colegio Enrique Rébsamen; todas estas familias hoy no están juntas.
Podríamos culpar a Marcelo Ebrard, a Mario Delgado, podríamos señalar a las constructoras ICA, CICSA (Carso Infraestructura y Construcción), Alston. Todos estos actores tienen parte de la responsabilidad, sin embargo, es bajo la gestión de la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum, que se vive una nueva tragedia debido a que no empujó en tiempo acciones correctivas ante un problema incuestionable y evidente de construcción y mantenimiento.
Hacer un alto en el camino y darnos cuenta de que todas nuestras acciones tienen una repercusión, que el hecho de saltarnos a la justicia mexicana cuando sea posible tiene consecuencias. Los “famosos” políticos lo seguirán haciendo y lamentablemente eso no va a cambiar, sería utópico pensar que esto será distinto, mientras ellos sigan siendo los mismos, los resultados serán iguales o peores.
En la medida de nuestras posibilidades debemos ser el cambio que queremos ver en este país, que hoy más que nunca necesita de nosotros. Necesitamos informarnos, cuestionar, no bajar la guardia, dejar de dar mordidas, retomar el civismo en muchas de nuestras acciones.
Muchos hemos perdido la esperanza en que las cosas cambien, porque siguen siendo los mismos o peores los personajes que conforman el gobierno. La desidia, la falta de interés como ciudadanos también provoca y gesta esta situación.
En un mes serán las elecciones, valdrá la pena que ese voto sea mucho más informado.




Comentarios