El agua, un lujo.

El agua es la fuerza motriz de toda la naturaleza.

Leonardo Da Vinci

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El agua, uno de los recursos más importantes y claves para la vida y el desarrollo del planeta y del ser humano, está siendo uno de los principales temas de conversación en nuestro país en las últimas semanas. Lo básico es saber que nuestro cuerpo está compuesto entre 50 a 70% de agua, –el de un recién nacido llega casi al 78%– y claro que todos desde niños hemos escuchado que este recurso se va a acabar, que va a llegar un punto en la historia donde la gran guerra se dará por la escasez de este valioso líquido. Pero lo relevante aquí es ¿qué estamos haciendo para cuidar este recurso, como sociedad y gobierno?

El planeta está compuesto en un 70% por agua, según datos de National Geographic, sólo el 3.5% es dulce y el 0.025, potable. Las cifras señalan que aproximadamente 2,200 millones de personas en el mundo no tienen acceso a servicios seguros de agua potable; 4,200 millones no disponen de servicios de saneamiento seguros y 3,000 millones no tienen lo básico para lavarse las manos.

Existen cifras que vale la pena conocer, como la siguiente: cada semana un millón de personas se mudan a las ciudades, hoy en día una de cada dos personas en el planeta, viven en una ciudad. El informe alusivo a 2014 de las “Perspectivas de la urbanización mundial” por parte de la División de Población de la ONU (DAES), señala que el mayor crecimiento urbano se llevará a cabo en la India, China y Nigeria.

Pareciera que en algunos lugares del mundo ya está ocurriendo una "guerra" por este recurso y nuestro país no es la excepción. Aunque en las últimas semanas ha resaltado lo que está ocurriendo en Monterrey, la realidad es que todos los días la disputa por el vital líquido ocurre en alcaldías como Iztapalapa y Ecatepec, en las zonas que conocemos como cinturones de pobreza. Hoy Monterrey es el foco rojo y más por las declaraciones de Samuel García, actual gobernador del Estado de Nuevo León, que, si bien resultan ciertas, no es correcto la forma en la que aborda el problema. La realidad es que existen comisiones y empresas que gestionan los recursos como el agua o la luz, y es en esas instancias donde está el origen de nuestros males, la corrupción, que se ha mantenido por décadas. En esta ocasión, el problema explotó como resultado de una de las sequías más severas que ha vivido el estado y por las pocas lluvias. En 2020, los niveles de almacenamiento de las presas disminuyeron 30% debido al confinamiento de la población ante la emergencia sanitaria, según datos de Agua y Drenaje. A estos hechos tenemos que sumarle el calentamiento global, que por supuesto también afecta.

La situación en este país no es la misma para todos, este recurso que es vital, sí llega a zonas de clase acomodada, pero ¿qué pasa con la gran mayoría que tiene que estar sin agua por días enteros?, además se ha visto un aumento excesivo en el precio; como ejemplo, los estantes de los supermercados tenían cientos de botellones de agua de 10 litros, con un costo aproximado de 35 pesos; hoy, un litro de agua cuesta entre 8 y 11 pesos. Si esto fuera un tema aislado o una eventualidad, creo que no le daría tanta importancia, sin embargo, el gobierno de México también ha decidido restar recursos para contar con una mejor infraestructura, lo cual es terrible no solo en el momento actual, si no para lo que esperamos en los próximos años.

De acuerdo con el informe de la cuenta pública, el cual es de libre acceso, en 2020 el presupuesto pagado del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) fue de 266,774.8 miles de pesos, cifra inferior en 34.1% con relación al presupuesto aprobado. La decisión derivada de la crisis de la pandemia y nuevamente todo en este gobierno será “culpa” de la pandemia.

Nuestro consumo promedio diario por persona en CDMX es de 366 litros al día y existen cifras que indican que el consumo residencial es más elevado, de 567 litros. De acuerdo con datos de la ONU, nos encontramos en el 5to lugar de los países que más consumen este recurso después de Estados Unidos, Australia, Italia y Japón.

Acciones podemos emprender muchas… solo es cuestión de consciencia. ¿Cuánto tiempo tardas en bañarte?, revisa todas esas acciones que puedes hacer desde tu casa para aprovechar mejor este recurso.

En México, ¿deberíamos pagar más por este servicio?

El tema es sumamente extenso y vale la pena abordarlo en una segunda entrega.

El agua es vida.