¿Viajar sola? No, conmigo y mis libros.
- Mariana E

- 25 oct 2019
- 3 Min. de lectura

Y así es como quiero contar mi primer viaje sola.
Las personas me preguntaban: ¿en serio te irás sola?. Y yo, de cierta forma siempre segura de mi respuesta, contestaba que sí. Digo de cierta forma, porque esperaba que mi mamá en algún punto del viaje llegara y así la tendría unos días conmigo. Pero esto no pudo ocurrir y creo que igualmente estuvo bien.
Mi viaje resultó diferente a lo que soy generalmente: una mujer super planificada y organizada, tanto que tengo cubierto hasta el 2080, jajaja. En esta ocasión no fue así, la realidad es que tomé un mapa y tracé mi ruta partiendo de Berlín como punto principal; después vi los lugares donde me imaginaba y quería estar (o regresar). Y así fue como decidí regresar a Madrid, ir a Berlín, conocer Polonia –por un sinfín de razones–, pasear por Praga, una ciudad de cuento, y al final, dirigirme a Viena sin ninguna expectativa.
Viajar, como lo he dicho antes, es una de mis pasiones y de mis más grandes inspiraciones.
¿Pero sola? Neta ¡qué miedo! jajajaja.
Hoy puedo decir con certeza, que ha sido de las mejores experiencias que he tenido en mi vida, de mis mayores aprendizajes y crecimiento. Me lo debía y lo necesitaba por muchas razones.
Estar contigo las 24 horas del día, es algo que se supone hacemos todo el tiempo, pero en realidad no es así o al menos yo no lo hacía de forma consciente. Hoy puedo decir que sí. Hoy sí me encuentro más conmigo y disfruto más de mis espacios, de mis tiempos y a lo que antes le temía tanto, hoy es de las cosas que más busco y gozo.
¿Y qué significa viajar sola? Significa tomar decisiones y ser vulnerable todo el tiempo, porque en realidad no sabes que vendrá después.
Una de las maravillas de mi viaje fue que me disfruté mucho siendo yo… así, sin expectativas y cumpliendo mis sueños. Los que me conocen, saben que tengo una energía que me hace levantar a las 4:30 am y que a veces me duerma hasta las 11 o 12 pm, jajaja. ¿Y eso qué implica en un viaje? Pues que me quiera comer las ciudades, sus calles, todos los museos, cada parque y por supuesto, comer delicioso. Y este ritmo a veces no es sencillo, sin embargo para mí es llegar al final del día y poder dormir con la satisfacción y el placer de saber que logré hacer todo lo que quería en cada destino.
Mi viaje estuvo lleno de magia, como el coincidir con personas que fueron poniendo su propia magia a cada momento, y fue un gusto conocer a tantas personas lindas y con tan buena energía de países o ciudades como Costa Rica, Mérida, Islas Canarias, Nueva York, Japón (Kyoto); gracias por hacer de mi viaje algo tan lindo. ¡Gracias!

Hablar de todo lo que ví, conocí, visité y comí (jajaja) en una sola entrega, sería complicado, además de que me encantaría dar tips y/o recomendaciones de lugares, museos, etc. Es por eso que he decidido que cada lugar tendrá su entrega, pues vale la pena platicar de cada uno por separado y un poco de todos.
Que no te dé miedo viajar sol@. Es más, que no te dé miedo nada, nada que impida buscar tu crecimiento y vivir tu propio ser.
¡¡¡Aviéntate y atrévete a estar contigo, a escucharte y a disfrutarte!!! ¿Te atreves?




Hola Marianita!! Gracias por compartir con la sencillez y simpleza. Se disfruta el leer tu gran aventura..