Leer, aprender, crecer: los hábitos que pueden transformar tu 2025

Uno de mis principales objetivos, tanto con mi blog como con el contenido que comparto en redes sociales, es despertar la curiosidad por aprender, crear, imaginar, y —sobre todo— el ir más allá de lo que simplemente nos han dicho que es “lo correcto”.

Nos enseñaron que lo correcto es estudiar, tener una carrera, si es posible hacer una maestría, encontrar un trabajo estable y dedicarle buena parte de nuestros días. Con suerte, ese trabajo incluso podría gustarnos. Si no, ni modo: hay que trabajar para poder sostenernos, empezando por lo más básico como la alimentación, la salud, nuestros gustos y todas las responsabilidades que surgen en el camino.

Para la gran mayoría, ahorrar es una meta difícil. Y cuando por fin logramos cierta estabilidad, muchas veces la llenamos de compromisos sociales, objetos que creemos necesitar, y —con algo de suerte— algunos viajes. Ojalá esta fuera la realidad de muchas más personas, pero lo cierto es que para muchos, esa comodidad está muy lejos de su día a día. Si tú tienes la oportunidad de vivir algo así, ¡qué maravilla!, seguramente te sientes agradecido. Pero, siendo sinceros, muchas veces cuando alcanzamos cierta comodidad, empezamos a darla por sentada. Y eso es un error. Ojalá no seas de ese grupo. Ojalá seas de los que valoran profundamente lo que tienen, reconociendo que es fruto del esfuerzo, de decisiones difíciles, e incluso de sacrificios.

En medio de la rutina diaria, a veces nos volvemos un poco autómatas: trabajamos, cumplimos, pero aprendemos poco. La rutina nos absorbe. Leer, por ejemplo, es una forma maravillosa de salir de esa inercia. Leer nos permite explorar mundos nuevos, descubrir ideas, entender perspectivas distintas. Nos mantiene despiertos. Y lo mejor es que la magia no termina cuando cierras el libro. A veces, justo ahí empieza: cuando compartes lo que aprendiste, cuando conversas sobre esas ideas, cuando tus pensamientos se enriquecen y comienzas a relacionarte mejor con los demás.

Todos aprendemos de distintas maneras: a través de libros, videos, experiencias, conversaciones, y sí, también en la escuela. Ahora que estamos a mitad del año, me emociona pensar cuánto más puedo aprender antes de que termine el 2025. El tiempo es, sin duda, nuestro recurso más valioso.

Así que te lanzo una pregunta: ¿qué tema te interesa hoy, que puedas ir explorando un poco cada día?

Todos queremos crecer de una forma u otra, pero si lo hacemos con dirección, con intención, el camino se vuelve más claro y más gratificante. Puedes empezar hoy mismo. Incluso el próximo viaje que sueñas hacer puede ser la excusa perfecta para empezar a aprender algo nuevo.