Piénsalo otra vez | Adam Grant

El poder de saber lo que no sabes.

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Cómo disfruto este estilo de lecturas, que además de seguir aprendiendo puedo poner en práctica en mi vida cotidiana y para ser más específica, en mi vida Godín (esa palabra que solemos utilizar muchos mexicanos para hablar de personas que trabajamos de 8 a 6 todos los días y más).

"El progreso es imposible sin el cambio, y aquellos que no pueden cambiar de opinión no pueden cambiar nada."

George Bernard Shaw

Cuantas veces nos aferramos a las mismas ideas, pensando que es lo correcto e inclusive ideas que ni siquiera son nuestras, pero que hemos vivido con ellas toda nuestra vida y con ello, simplemente nos frenamos para no hacerlo de manera distinta. Este libro te invita a cuestionarte sobre el poder de saber lo que no sabes y que dejes de lado todo lo que crees saber y además, asumes que es lo correcto.

Para ello, pone como ejemplo a compañías como Blackberry, que no supo cómo adaptarse a los cambios, sin embargo, no fue la empresa la que no se adaptó a un entorno cambiante, fueron las personas, como resultado de la gran cantidad de decisiones que toman todos los días.

Como bien menciona Adam Grant en el libro, casi todos nos enorgullecemos de nuestros conocimientos y experiencia y de permanecer fieles a nuestras creencias y opiniones. Es una actitud que tiene sentido en un mundo estable, donde obtenemos distintas recompensas por estar convencidos de nuestras ideas. El problema es que vivimos en un mundo que cambia a toda velocidad, donde resulta necesario dedicar tanto tiempo a pensar como a reconsiderar.

La palabra clave es RECONSIDERAR, es un conjunto de habilidades, pero es también una actitud.

Durante la lectura, el autor menciona las diferentes formas en las que nos desenvolvemos dependiendo del público al cual nos dirigimos (predicadores no necesitan pruebas, políticos no necesitan formación, fiscales ¿necesitan demasiada información?, pero una que me llamó mucho la atención es la postura del científico de profesión, la cual espera que dude de todo lo que sabe, que sea curioso sobre aquello que desconoce y que actualice sus puntos de vista a partir de datos que aparecen. (Sería increíble poder hacerlo de esta forma todo el tiempo, pero exige bastante más que solo reaccionar con la mente abierta). Para ello se requiere de una humildad intelectual, es decir, con saber lo que no sabemos. Todos deberíamos confeccionar una larga lista con las materias en las que somos unos verdaderos ignorantes.

Reconocer nuestras limitaciones abre la puerta a las dudas.

El libro muestra un esquema que es muy valioso: el ciclo de la reconsideración donde se necesita humildad, duda, curiosidad y descubrimiento, a diferencia de la autosuficiencia donde se encuentra el orgullo, la convicción, sesgos de confirmación y deseabilidad y validación.

Hablaré de la humildad, parte crucial del ciclo de reconsideración; es un concepto que me tiene pensativa desde hace varios días, cuya raíz latina significa: de la tierra. Consiste en tener los pies en el suelo, reconocer que tenemos defectos y que cometemos errores.

Algunos datos importantes:

• En 1980, el conocimiento médico se duplicaba cada siete años, y en 2010 ya lo hacía en la mitad de ese tiempo.

• El efecto Dunning-Kruger, cuando carecemos de las competencias necesarias somos mucho más propensos a rebosar confianza.

• Aborda el tema del síndrome del pasador vs el síndrome del impostor (del cual presenta una teoría muy interesante).

Frases, pensamientos e ideas:

• La capacidad intelectual no garantiza la destreza mental. Por más inteligencia que tengas, si careces de buenos motivos para cambiar de opinión, vas a perder muchas oportunidades de pensar las cosas otra vez.

• Cuando eres muy brillante, te resulta muy difícil detectar tus propias limitaciones.

• Si la información es poder, saber lo que no sabemos es sabiduría.

• La maldición del conocimiento es que cierra la mente a lo que desconocemos.

• La ignorancia engendra confianza con más frecuencia que el conocimiento. Charles Darwin

• La confianza es una medida de la seguridad en uno mismo.

• No confiaba en los conocimientos que ya tenía, sino en su capacidad de aprender.

• El aprendizaje requiere la humildad para darse cuenta de uno tiene cosas por aprender.

• Quien eres debería ser una cuestión de valores, no de creencias. Los valores son los principios básicos que sigues en la vida, pueden ser la excelencia, la generosidad, la libertad y la justicia o la seguridad y la integridad.

• Las discusiones crean nuevas formas de ver las cosas.

Hoy es mucho más sencillo seguir leyendo y de alguna manera validando tu opinión a través de todos los algoritmos que tenemos en las redes, donde nos sale más contenido del cual damos me gusta, etc., ¿pero qué tanto, de manera consciente, leemos artículos u otros datos que no estén directamente relacionados con nuestra postura?.

Es un libro que recomiendo 100% porque nos invita a cuestionar nuestras propias creencias y además da herramientas para hacerlo de modo diferente.

Otros temas que aborda, adicional a los ya mencionados, es por ejemplo a tener discusiones constructivas, ya que nos ayudan a desarrollar la valentía de luchar por ciertas ideas y la resiliencia para ceder en una discusión sin perder la determinación. Es el poder de escuchar, basado en la atención.

La emoción de no creerte todo lo que piensas.

Cambiar de opinión no te convierte en una veleta ni en un hipócrita.

Significa que estás dispuesto a aprender.

Un poco del escritor…

Adam Grant, es uno de los más prestigiosos profesores de la Escuela de Negocios de Wharton en la Universidad de Pensilvania, donde ha sido uno de los mejor calificados durante siete años seguidos. Ha sido destacado como uno de los 25 teóricos del management más influyentes y uno de los 40 académicos más importantes menores de 40 años por parte de la revista Fortune.

¿Y tú, qué vas a reconsiderar?